Buenas y malas que dejó el 2013
Se terminó una temporada cargada de torneos. Hubo muchos festejos, algunas desilusiones y también personas que nos dejaron. Acá te mostramos el resumen de lo que pasó este año.
CHRISTIAN SOSA
El año deportivo del futsal finalizó antes de lo previsto por esas situaciones que tiene la vida, que no tienen explicación alguna pero suceden. Estaba todo dado para que el 2013 culminara de la mejor manera con equipos coronándose campeones y levantando las dos copa que estaba en juego.
Pero el año arrancaba allá por febrero. Con todos los equipos en plena pretemporada se disputaron varios torneos preparatorios. El más importante fue el Vendimia (jugado en Regatas) que lo ganó Jockey Club.
El primer torneo nacional del año se iba a disputar en Mendoza. Nuestra provincia fue sede del Argentino de Clubes Femenino en San Martín y Junín. Ese torneo lo jugaron cuatro equipos mendocinos y el mejor ubicado fue Cementista que quedó tercero.
El año avanzaba y en junio llegaría la primera gran alegría para el futsal local. En Paraná se jugó el Argentino de Selecciones Femenina y el conjunto borravino conducido por Jesús Ayala fue el mejor y se volvió con la copa y toda la gloria.
Al mes siguiente Jockey Club sería el gran protagonista. Primero el conjunto de Villa Hipódromo se consagraría campeón del torneo Apertura local, venciendo en las finales a Regatas A.
A fines de ese mes este mismo club levantaría otro trofeo. En este caso fueron los juveniles quienes se coronaron en Misiones en el Argentino de Clubes.
En agosto la selección argentina volvía jugar un torneo internacional. El conjunto albiceleste disputó los Juegos Mundiales en Cali, Colombia. Para ese torneo el técnico Ariel Avveduto eligió a cuatro mendocinos. Federico Pérez, Marcelo Mescolatti, Nahuel Parada y Renzo Grasso.
Argentina perdió el partido por el tercer puesto pero lo más importante fue que el equipo nacional recuperó juego y muchos jugadores demostraron su talento. Retornando a nuestro país.
Mendoza sería la sede del Argentino de Selecciones Juveniles. Jugando de local el equipo del Beto Lucero era el gran candidato, pero se encontró con Ushuaia, el mejor de torneo (y campeón) que lo mandó a jugar por el tercer puesto y logró subirse al podio.
En setiembre todas las fichas estaba puestas en el Argentino de Selecciones Mayores que iba a jugarse en Comodoro Rivadavia. Mendoza volvía a jugar con los mejores y también el combinado de Las Heras. Pero dos semanas antes el torneo fue suspendido y nos quedamos con las ganas de ver a los mejores de nuestra provincia.
El torneo más esperado del año se disputó en octubrey en Mendoza. La cita era nada menos que el Sudamericano de Clubes donde Talleres tenía la gran chance ante su gente de levantar la copa. Y el Matador no defraudó.
A lo largo de una semana y con un estadio que lució repleto, el conjunto azulgrana hizo un excelente campeonato y le dio a Mendoza su primer título a nivel continental.
Pocos días después recibimos la primera piña del año. Juan Carlos Invernizzi, técnico de Regatas B, dejaba este mundo tras una enfermedad. En noviembre se llevó a cabo el Mundial femenino en Colombia. Argentina tuvo una destacada actuación y culminó cuarta.
El equipo albiceleste estuvo integrado por seis mendocinas. Sabrina Castro, María Victoria Pintos, Mariana Di María, Ana Ontiveros y Alejandra Argento y Gimena Blanco.
Se acercaba fin de año y otra División de Honor era el deseo de cinco equipos locales. Hasta Trevelin viajaron con la ilusión de ser campeón. Los que más lejos llegaron fueron Regatas A y Don Orione que finalizaron tercero y cuarto respectivamente. El dato de ese torneo fue que, por primera vez en seis años, un equipo de Mendoza no llegó a la final.
En diciembre quedaban por definirse en campeón de la Copa Mendoza y el mejor del Clausura. La triste noticia del fallecimiento de Gabriel García Moyano dejó sin ganas de nada a todos, quedando por definirses dos torneos para principios del 2014.
Con buenas y malas, así se nos fue este 2013 cargado de torneos locales, nacionales e internacionales. Festejamos, sufrimos y también lloramos.
Que el 2014 sea de muchos éxitos, muchas alegrías y sean más los festejos que los lamentos. Feliz año para todos.