Los chicos quieren estar en el Mundial

Tras cuatro días de intensos trabajos en Mendoza, la concentración de la preselección argentina sub 17  llegó a su fin.

Un total de 28 jugadores de nuestra provincia, Buenos Aires y Tierra del Fuego, de categorías 1999 y 2000 (16 y 17 años), estuvieron en el estadio Vicente Polimeni demostrando por qué quieren formar parte de la lista de 12 que estarán en Paraguay jugando el Mundial de la categoría en julio.

Desde el pasado jueves hasta ayer los jugadores tuvieron jornadas de triple turno de trabajo que estuvieron supervisados por Mauricio Ginestar que estuvo evaluando el estadio físico de los futbolistas.

Por la tarde-noche el director técnico Humberto Lucero, junto a su ayudante Martín Cusa, eran el encargado de la parte técnica y táctica de estos jugadores que se encuentran en etapa de formación y muchos todavía no tienen incorporado del todo.

Por la noches era el momento de ver a los jugadores en acción con algunos minutos de fútbol. En la jornada de ayer hubo partidos amistosos con los cadetes y juveniles de Talleres, Cementista y Municipalidad de Las Heras.

“En líneas generales sacó buenas conclusiones. Técnicamente están bien aunque muchos chicos tienen que aprender los conceptos básicos” comentó el Beto Lucero.

Teniendo en cuenta la edad de los jugadores el entrenador tiene en claro que debe seguir trabajando y buscando el equipo ideal. “Hay mucho individualismo, hay que armar un equipo. Tenemos que seguir observando para encontrar a los mejores” agregó el entrenador.

“Hemos reunido a los mejores jugadores de esta categoría. Ahora el desafío es armar un equipo que sea competitivo para jugar el Mundial”

Luego de esta concentración habrá un recorte de jugadores donde quedarán los quince mejores.

Esos futbolistas estarán en la próxima reunión prevista para abril y ahí quedarán definidos los 12 que jugarán en Paraguay. Y de ser posible, una última concentración los días previos ante de viajar a jugar el Mundial.

“El nivel que ví de los jugadores de Mendoza fue muy parejo. No es lo que uno espera pero hay que adaptarse porque no tenemos mucho tiempo”