Con una banca de oro
Regatas A caía 1 a 0 frente a Talleres A pero desde el banco llegaron los goles de Gimenez y Barbisan para dar vuelta el resultado y quedar a un paso de la final. La vuelta el viernes en Regatas.
IGNACIO SAMPEDRO
Regatas A dio vuelta el resultado, en un partido parejo y a fuerza de coraje y fútbol consiguió 2 goles para llevarse el primer chico en estas semifinales que prometen una vuelta apasionante
Una nueva edición del clásico del futsal mendocino se disputó en cancha del Matador, en el partido de ida de las semifinales del torneo Apertura.
Talleres A y Regatas A reeditaban las semifinales del torneo anterior que quedo a favor del equipo del Parque.
Como todo clásico comenzó con los dientes apretados. Intercalando la marca arriba, en mitad, pero siempre con gran dinamismo.
Con estilos de juego definidos, los primeros minutos fueron parejos. Talleres buscaba jugar por las paralelas. Regatas rotaba buscando la aparición de Matias Cassab.
Los primeros 10 minutos transcurrieron sin ocasiones reales de peligro, algunos remates de media distancia de Jonathan Gallegos, Cassab y de Ariel De Gaetano. Mucha fortaleza defensiva y poca creación abundaba en el rectángulo.
Los técnicos empezaron a buscar soluciones a la falta de juego en el banco de suplentes. Pablo Rodríguez y Martín Paez en los locales, Nahuel Parada y Gastón Alto en la visita.
A los 13′ Parada quedó mano a mano frente a Ignacio Luvello y su definición se fue por arriba del travesaño.
Dos minutos después Pablo Rodríguez presionó a Marcelo Giménez, robó la pelota, se fue contra Flavo Delpodio, cruzó el remate, Mauro Albertini la sacó con la pierna. El rebote fue capturado por Matías Ghiotti que con el arco a su merced anotó el 1 a 0.
Regatas fue a buscar el empate. El Chelo Giménez exigió a Nacho Luvello y después una volea de Marcos Basile se fue cerca del palo izquierdo.
El primer tiempo terminaba y Giménez habilitaba a Parada que, mano a mano frente al arquero, definía pero el poste le negaba el gol. El Matador se iba al descanso arriba por la mínima, en un partido equilibrado sin demasiadas situaciones de peligro.
La paridad sobre la baldosa se reflejó en los primeros minutos del segundo tiempo.
A los 4′ Regatas hizo una buena combinación de pases, Cassab cruzó a Delpodio que asistió con justeza a Barbisán que de frente al arco puso el 1 a 1.
El partido era trabado, muchas faltas hacían desprolijo el juego.
El tiempo transcurría y la tensión aumentaba en el ambiente, se palpaba que un error se podía pagar caro. Se necesitaba la iluminación de algún crack.
A los 13′ el Matador se durmió en un lateral, Giménez cabeceó y Nacho Luvello la sacó del ángulo.
La jugada tan esperada llegó. Lateral largo Parada recibió con el pecho antes y que cayera hizo dos payanitas, se la llevo con la cabeza ante la marca y ante la salida del arquero cedió a Giménez que puso el 2 a 1.
Con la necesidad de buscar el resultado Gabriel Robledo decidió el ingreso de Fede Pérez para que el portero jugara con los pies.
Maximiliano Ponce tuvo una chance pero su remate desde la derecha se fue por arriba.
Regatas se defendía bien, Talleres no encontraba la fórmula para llegar al arco de Albertini. A falta de 1’30 El conjunto azulgrana llegó a la penalización.
El marcador no se movió. Regatas A se llevó el primer chico, en un partido equilibrado, se iluminó en el momento justo, y contó con suplentes que entraron con el pie derecho a la cancha y se lleva al parque medio boleto a la final.