Un pivot como los de antes, pero hoy

IGNACIO SAMPEDRO

El futsal, es un deporte hermoso, reúne las características del futbol mezclado con la habilidad demostrada en espacios pequeños. Los grandes jugadores de Mendoza, así como los técnicos avezados, siempre han hablado sobre la importancia del pívot dentro del equipo.

En un futsal que ha ido cambiando sus características a lo largo del tiempo, es cada vez más difícil encontrar esos pivots, que una vez que ponían la pelota debajo de la suela, volvían locos a sus rivales, y en la jerga futbolística hacían que los hinchas pensaran que era imposible sacarle la pelota.

Martín Páez, trasladó su habilidad de la cancha grande, a la baldosa de Covimeni, para luego de grandes actuaciones, pasar a Andes Talleres, uno de los clubes históricos del futsal mendocino.

El Tincho o el Gordo, partido a partido demostró tener esa cualidad tan diferente y preciada que es la de saber jugar de espalda al arco y ser goleador y asistidor de sus compañeros, y luego de sus grandes actuaciones, tuvo la oportunidad de ser partícipe de este proceso que se inició el día domingo, en la cancha de Godoy Cruz.

Páez, fue uno de los jugadores que fue convocado por primera vez, a la preselección argentina y de muy buen grado nos cuenta, cuáles fueron sus sensaciones y pensamientos luego de su primer entrenamiento.

-¿Cuáles son las expectativas para este proceso que comienza?

-Primero y principal es aprender. Yo vengo del fútbol de cancha grande, hace poco tiempo que estoy en el fútbol de salón y creo que tengo muchas cosas para aprender, poder copiar y crecer al lado de los chicos que llevan bastante tiempo en esto.

-¿Qué significa este reconocimiento?

-La verdad es algo muy lindo, me tomó de sorpresa porque no me lo esperaba para nada. Pero uno viene haciendo las cosas bien en el club aunque soy consciente de que tengo que ponerme a punto físicamente, pero la verdad muy contento de todo esto nuevo que estoy viviendo.

-Se te ve en un gran nivel desde hace un tiempo, siempre destacándote en los partidos ¿ Qué sensaciones te genera?

-Gracias a Dios, la pelota está entrando y en el club se ha armado un muy lindo grupo. Eso ayuda mucho al momento de jugar, más allá de los buenos jugadores que siempre ha tenido Talleres, el grupo y el apoyo entre todos es algo que suma mucho.

-Ya cada vez existen menos Pívots con características similares a las tuyas, jugadores que aguantan muy bien la pelota, que tiene una gran habilidad cuando la redonda está en la suela. ¿Por qué crees que existe está realidad?

-Por ahí en estos momentos se juega mucho más en relación a la rotación, se práctica un futsal cada vez más veloz, dónde todos tienen que marcar y eso hace que sea más difícil. A mí me cuesta mucho marcar. Yo creo que esto hace que a un jugador que la aguante o juegue bien de espaldas, tenga que sacrificar un poco su juego para marcar más.

-Este es un proceso orientado al año 2015, ¿Cómo haces, para equilibrar el entrenamiento en tu club, los partidos, el trabajo, y los entrenamientos del preseleccionado?

-Cuesta encontrar el equilibrio , recién hablábamos de esto justamente con algunos de mis compañeros, uno trabaja y se hace difícil, pero al que le gusta el fútbol se hace los tiempos. En mi caso entrenar con el club y entrenar los domingos con la preselección me va ayudar a ponerme bien físicamente y poder estar a la orden de lo que me pidan los profes.

-¿Cómo ves el campeonato local? ¿Cómo vez a Talleres?

-Pienso que estamos en proceso de mejora, habíamos arrancado más o menos, pero llevamos cuatro victorias ante equipos importantes, y eso ayuda a mejorar la confianza. Estamos en un proceso, esperemos seguir mejorando, para clasificar a los playoff y hacer un buen trabajo.

-¿Dónde te vez en el año 2015?

– Ojala esté con la selección, es lo que uno sueña, y ha soñado desde siempre, desde que jugaba al fútbol tanto en cancha grande como en cancha chica, siempre he soñado con la selección y ojala pueda estar allí.